La vieja capital de Menorca es una de las ciudades más bonitas de la isla, si buscas qué ver en Ciutadella estas en el sitio indicado. Las influencias extranjeras debido a la compleja historia de Menorca no solo se ven reflejadas en la cultura y gastronomía sino también en la arquitectura que hasta el día de hoy se conserva y es de lo más representativo de Ciutadella.
De día podrás disfrutar de su historia, callecitas medievales en las cuales perderte, su puerto, la catedral, iglesias, conventos, plazas, y monumentos históricos que te enamoraran a primera vista. Y de noche podrás disfrutar del aire del Mediterráneo en su mejor momento ya sea paseando por el puerto, tomando cerveza en algún bar, o simplemente recorriendo la ciudad a pie con otra luz.
A continuación, te contamos cuáles son los lugares en Ciutadella que no puedes perderte en tu próximo viaje a Menorca.
Catedral de Menorca
Ubicada en el casco histórico, la Catedral de Santa María de Ciutadella data del 1362 y fue construida sobre una Mezquita y es uno de los atractivos turísticos más emblemáticos de Ciutadella, conservando la fachada gótica, las molduras originales y el órgano del siglo XIV.
Al estar ubicada en el centro de la ciudad, el parking puede ser complicado. De todas maneras, tienes dos opciones: estacionar en la calle y pagar el parking a través de una app, en la cual los horarios y precios varían según la temporada o, estacionar en algún parking a las afueras del casco histórico y disfrutar de una maravillosa caminata.
Museo Municipal de Ciutadella
Situado en el histórico edificio del Bastió de Sa Font, en los restos de lo que fueron las murallas de la ciudad, se encuentra el Museo Municipal de Ciutadella. En su exposición permanente se puede ver la historia de la isla, desde la era prehistórica, pasando por la romana, el inicio del cristianismo y la época musulmana de Menorca. Además, cuenta también con exposiciones temporales muy interesantes.
El museo depende del Ayuntamiento de Menorca, y se puede visitar de martes a sábados de 10 a 14 horas, siendo uno de los museos más visitados de la isla. Encontrar aparcamiento en la zona puede complicarse, pero podrás caminar hasta allí sin problema si te encuentras alojado en la zona del casco histórico o dejas el parking en las afueras de Ciutadella.
Puerto de Ciutadella
El Puerto de Ciutadella es uno de los atractivos turísticos más populares de Menorca, no solo por su historia, sino también por lo pintoresco que es y por su ambiente. Bajando las escaleras desde Plaça Es Born, se puede disfrutar de un precioso mercadillo en donde podrás encontrar infinidades de artesanías, productos locales y souvenirs.
Durante el día se puede apreciar la tranquilidad de la zona, con maravillosas postales del mar y yates de lujo que contrastan con los barcos pesqueros. Allí también encontrarás una gran oferta gastronómica, que podrás disfrutar en las distintas terrazas del puerto.
En cambio, de noche la tranquilidad se convierte en bullicio, ya que el puerto tiene una gran vida nocturna, animada tanto por turistas como por los locales que disfrutan de los numerosos bares y terrazas mientras se maravillan con el paisaje nocturno.
Te recomendamos recorrer esta zona a pie, dejar el coche aparcado en el casco histórico o en el hotel en el que te alojas, y disfrutar de los paisajes del puerto.
Piérdete en sus calles medievales
Sin lugar a dudas, la mejor manera de disfrutar de Ciutadella es caminando, sobre todo en la zona del casco histórico. Como muchas otras ciudades de España, Ciutadella tenía una muralla alrededor, y una vez que fue demolida, se mantuvo una delimitación que separa lo antiguo de lo moderno.
En sus calles se puede ver y también sentir la mezcla de culturas y arquitecturas de estilo medieval y árabe que le dan una magia especial y hacen que te transportes en el tiempo mientras exploras la ciudad.
Ciutadella siempre fue reconocida por ser un importante núcleo religioso y eso se ve reflejado en las calles, en las que te encontrarás con numerosas iglesias y conventos con sus fachadas originales e impresionan con sus claustros y frescos en las paredes que hasta el día de hoy se conservan.
Molí des Comte
Aquí te recomendamos una parada gastronómica con gran historia, para que disfrutes a la hora de comer en la ciudad. El molino fue construido en el siglo XVII y funcionaba para almacenar los cereales que se recogían de la zona para proveer a toda la ciudad. Cuenta con 18 bóvedas y está construido de piedra de marés, que no solo es empleada para moderar la temperatura y la humedad, sino que también es un elemento decorativo de gran valor.
Puede que lo más curioso del Molí des Comte sea que la parte superior del molino es donde estaba el hogar del molinero. En 1905 cayó en desuso y luego de casi 90 años el Ayuntamiento propuso darle una nueva función: comenzó siendo una galería de arte, y fue mutando hasta hoy convertirse en un restaurante donde no solo se puede disfrutar de una excelente gastronomía, sino también de la belleza interior de esta construcción.
Mercat des Peix
Otra opción para comer en Ciutadella, y también conocer uno de sus lugares más emblemáticos. En el centro del casco histórico, alrededor de la Plaça la Llibertat en donde se ubica el Mercat des Peix o Mercado Municipal. Es la única estructura de hierro que conserva la ciudad y es uno de los sitios más visitados por los locales y turistas. En temporada de verano, es un gran lugar para sentarse a disfrutar de un buen café.
Dentro del mercado, puedes encontrar una gran variedad de frutas y verduras frescas de las huertas de Menorca, pero sin duda destaca, como lo dice su nombre, por la gran cantidad y variedad de pescado fresco.
La mejor forma de llegar al mercado es caminando. Si vas en coche, lo recomendable es dejarlo en Plaça des Born, aunque allí tienes que pagar un ticket de parking.